Hay dos enemigos silenciosos del cabello que te arruinan el look incluso cuando hiciste “todo bien”:
el frizz y el daño térmico.
Ni te aviso: trabajan en equipo para que tu pelo se infle, se reseque y pierda forma en cuestión de minutos.
La buena noticia: son evitables. Y con un par de hábitos diarios + un producto clave, el pelo se mantiene ordenado, suave y con vida incluso en días húmedos… o después de un secador usado a potencia misil.
1. El frizz: por qué aparece realmente
El frizz no es “maldad capilar”. Es física pura:
-
Cuando el cabello está deshidratado, busca humedad del aire para compensar.
-
La cutícula se abre, el pelo se expande y… boom: nube.
-
Si encima el clima acompaña — lluvia, humedad, vapor, transpiración — el resultado es pelo con voluntad propia.
Otros culpables del frizz:
-
Cepillarte el pelo seco (fricción innecesaria).
-
Dormir sobre fundas ásperas.
-
Exceso de químicos sin hidratación posterior.
-
Falta de un film protector que selle la fibra.
2. Daño por calor: el spoiler que nadie quiere
La planchita, el secador y la bucleadora son aliados… hasta que no.
Cuando la temperatura es alta:
-
La fibra pierde agua.
-
La queratina se debilita.
-
El pelo se vuelve más opaco, quebradizo y con puntas abiertas.
Y si el pelo ya está débil, el frizz se multiplica.
O sea: frizz + calor = caos.
3. Cómo controlar el frizz y protegerlo del calor con pequeños hábitos diarios
Acá es donde ganás. Son detalles simples que hacen diferencia real.
- Secado inteligente
No frotes con la toalla: presioná para quitar el exceso de agua.
Menos fricción = menos frizz. - Usá el secador con dirección descendente
Apuntá el aire hacia abajo para ayudar a cerrar la cutícula.
Suavidad instantánea. - No planches el pelo empapado
Siempre que quede solo ligeramente húmedo.
Planchar mojado es receta para el daño. - Usá cepillos adecuados
Paleta para alisar, peine ancho para desenredar.
Evita el frizz preventivamente. - Elegí productos que sellen cutícula
Aceites livianos, bifásicos, protectores térmicos.
La clave es dejar una película fina que mantenga la hidratación adentro. - Dormí sobre satén o seda
Menos fricción, menos encrespamiento, menos rotura.
4. El paso que hace la verdadera diferencia: un protector térmico + anti-frizz todo en uno.
Acá entra en escena el que te mencioné:
Bifásico 3 en 1 de Hew Keratin — Protector Térmico + AntiFrizz + Efecto Paraguas.
¿Por qué suma tanto?
-
Protege hasta 250 °C, así evitás daño por secador o planchita.
-
Controla el frizz de verdad, sellando cutícula y dejando el pelo suave.
-
Efecto paraguas: repele la humedad ambiental (el frizz ni arranca).
-
Textura liviana: no apelmaza ni deja sensación grasa.
-
Hidrata y nutre gracias al argán, coco, queratina vegetal, pantenol y vitamina E.
Cómo usarlo:
-
Agitá bien (es bifásico).
-
Aplicalo con el pelo húmedo antes del secado.
-
Si querés, sumá un toque con el pelo seco para mantener el control durante el día.
En tres pasos ganás brillo, control y protección real.
Conclusión: frizz y calor no tienen por qué arruinarte el pelo
Con hábitos simples + un buen protector térmico anti-humedad, el pelo cambia por completo:
menos frizz, menos daño, más suavidad, más orden.
Si querés, te hago otra versión más técnica, más “editorial”, más corta para redes o más orientada a venta.
